Aron se veía desanimado, antes de que yo pudiera explicarle la situación me interrumpió con una gran cantidad de preguntas.
-¿De verdad te comprometiste con Adam Keller?
¿Lo amas?
¿Te ama?
¿Desde cuándo viven juntos?
¿Acaso ya no sientes nada por mí?
-Aron yo…
-Claro que nuestro compromiso es verdad, si me ama y yo a ella, vivimos juntos desde hace un par de meses, pero ahora viviremos juntos toda la vida y no, ya no siente nada por ti.
¡Genial! De nuevo Keller llegó para fastidiar todo. Esa maldita boca lo perdía.
-¿Es verdad lo que él dice, Emma?
Asentí, no todo era verdad, Adam y yo no nos amábamos, tampoco vivíamos juntos, aunque justo ahora parecía que sí…
-Es verdad. Aron. Nos casaremos pronto.
-Entiendo…
Aron hizo una mueca de dolor.
-Ya puedes irte. Emma y yo llevamos prisa, así que vete.
-¡Adam!
-Lo siendo bonita, pero es cierto, tenemos prisa y nos está quitando el tiempo.
-¿Eh?
Ay… La cita…
Había olvidado por completo que me harían un chequeo médico hoy.
-Aron… Tenemos que