Brenda se había quedado toda la noche esperando a su esposo sentada en el comedor la cena especial que preparo estaba fría sobre la mesa, decepcionada se sirvió una copa de vino y miro la mesa con decepción.

Cansada de esperar se levantó de la mesa para ir a su habitación en ese momento escucho el ruido de un auto afuera sonrió emocionada y se quedó de pie frente a la puerta, minutos después entro Armando su ropa estaba desarreglada, su cabello despeinado, Brenda preocupada se acercó a él dándose cuenta que apestaba a alcohol

-cariño

Él se balanceaba de un lado al otro perdiendo el equilibro por estar ebrio preocupada Brenda lo apoyo sobre sus hombro para ayudarlo a subir a su habitación

-¿Dónde estabas? ¿Por qué estas ebrio?

Reclamo molesta mientras lo ayudaba a subir a su habitación por las escaleras lo sostuvo con fuerza para que no tropezara no era un trabajo fácil Armando era un hombre alto y robusto lo que le dificultaba el trabajo a Brenda que a pesar de estar en buena for