Capítulo 49. Es el vestido perfecto
—¡Meghan!
El grito de Mía alertó a la pareja. El corazón de Meghan se agitó entre el deseo y el miedo a ser sorprendida en aquella situación junto a Patrick.
—¿Qué hace aquí? —masculló Patrick con la voz agitada.
—No lo sé.
Nuevos golpes a la puerta les hizo estremecerse. Mía llamaba como si fuese algo urgente.
—Sal, Meghan, ¡han secuestrado a Patrick! —gritó.
Patrick arrugó la frente.
—¡Patrick no está por ninguna parte, Meghan, se lo han llevado! —gritó con mayor desesperación.
Meghan tragó el nudo formado en su garganta y empujó el cuerpo de Patrick.
—Duérmete —le ordenó.
—¿Qué?
—Shhh —susurró Meghan, colocando un dedo sobre los labios de Patrick—. Cierra los ojos y finge dormir —le insistió.
Patrick estaba dispuesto a que los descubrieran, pero la mirada asustada de Meghan le hizo obedecer.
Meghan respiró profundo y una vez estuvo segura de que Patrick había hecho lo solicitado, caminó a la puerta y la abrió.
—Mía.
—Te has demorado una eternidad, Meg —dijo, entrando a la habitació