Narra Alex.

Como me gustaría poder ayudar mejor a Valentina, espero que el equipo de seguridad que he preparado sea más eficiente, algo que estoy seguro de que ella no sabe es que su vehículo es aprueba de balas.

Sin embargo, en este momento voy a llamar la atención de mi tío, he dejado a Amelia con los niños en un sitio seguro, puse en riesgo a Valentina, no pienso hacerlo con Amelia.

Estoy llegando a Canagua y voy directo a mi casa, sé que no será nada fácil, pero al menos tengo más confianza en esta ocasión.

Al llegar frente al portón, me abrieron sin necesidad de identificarme, mi tío salió de la casa.

—Vaya, el hijo pródigo ha regresado a casa.

—Sabes muy bien que esta no es tu casa, a ti se te declaro muerto y por ende no tienes ningún derecho.

—Alex, no has entendido, no me interesa la casa, únicamente me interesa lo que hay en una habitación en específico.

— ¿Cuál habitación?

Conozco cada sitio de esa casa y sé que no hay nada en especial, lo que le da el valor a la casa es po