Débora sonrió y asintió estando de acuerdo con ese comentario, por lo que busco tomar un poco de su jugo.
- Ven gordito, ayúdame a poner las hamburguesas en las bandejas – le llamó Carolina.
- Tenga suegro, lleve esto a la mesa – indicó el rubio pasándole el boul con papas fritas.
- Voy – indicó el