Escuchar esas palabras hicieron que Casandra se asustara, porque notaba que su madre no estaba bromeando y hablaba muy enserio.
- Mamá ¿estás hablando en serio?
- Si, así que decide Casandra ¿estás conmigo o con tu padre?
- Contigo – declaró rápidamente ella, porque ella se negaba a trabajar y vi