¡Somos nosotros quienes creamos nuestros propios
demonios!Schaide estaba en una pequeña ciudad al norte deDublín llamada Lusk voy a la ciudad pequeña, pero muyacogedora estaba atravesando la principal carretera, llamadaDublín Rd. Su coche de modelo más antiguo, entoncescuando estaba a la ciudad de Lusk, se detuvo en la pequeñaen pequeña iglesia llamada Saint Maccullins.Al ver un pequeño estacionamiento, él paró su cochey se adentró en el pe-queno cementerio que había delante dela iglesia, el cementerio lleno de cruces celtas mostraba queaquella iglesia era un refugio. Al entrar en la pequeña igrej aSchaide se veía cómodo incluso teniendo en su camino unade las criaturas más maléficas de todo el mundo, Judas, sumiedo transformaba en esperanza y su esperanza le daba másfuerza.Judas estaba en la carretera yendo hacia la pequeñaciudad sintiendo Schaide cuando él notó que él había parado.Su sorpresa fue tan grande al