Sol corría para poder llegar al restaurante, entro por la puerta trasera y fue a su camerino.
— Pensé que no llegaba — se terminaba de arreglar mientras Martín le daba un café.
— Igual yo, espero que disfrutaras el día libre de ayer.
— Algo — recordaba lo que había pasado con Ava — pero ya estamos aquí para continuar.
— Tu jefe está de nuevo sentada, espera que ya salgas.
— Mi jefe, creo que no se va a cansar de esto — se sentó en la silla — pensé que se olvidaría de Tina.
—Quería saber cómo les fue en la clase — Martín tomo una silla y se sentó a un lado de Sol.
— Casi no hubo, le llamaron para una fiesta. Así, que después tuve que ir corriendo al departamento. Violeta quería que fuera — terminaba de colocarse la peluca.
— Vaya, que lío, espero que se solucione pronto y puedas dejar de esconderte.
— De aquí, hasta que me vaya de vuelta a casa.
Sol salía a tocar el piano, en esta ocasión la me