Una semana después.
La puerta es tocada, abro mis ojos viéndome en la cama del cuarto que tiene el jet privado, Agatha duerme a mi lado, me levanto y abro la puerta viendo a Mike.
— Estamos por aterrizar — asiento y camino hacia Agatha, la mueve despertándola.
— Amor, levántate, estamos por aterrizar en Alemania… — bostezo, abre sus ojos, se ve pálida, más de lo normal, se sienta en la cama, toco su frente — ¿Te encuentras bien? — niega.
— Me siento mareada… — la ayudo a levantarse, salimos del cuarto y nos sentamos, saco una bolsa de papel y se lo doy, frunce el ceño sin entender.
— Por si vomitas — se ríe pero si vomita en la bolsa, su cabello estaba recogido en dos trenzas, sobo su espalda y tomo la bolsa poniéndola lejos de ella y le paso otra por si le dan ganas de volver a vomitar &md