••••••••••
12: 00 am.
Kristy decaída no lograban conciliar el sueño.
Se había prometido castigar a Nathaniel por su cruel comportamiento con ella.
No quería seguir siendo tratada con tal indiferencia, una que le causaba dolor a su corazón.
La hermosa mujer rubia, que se encontraba recostada en su cama, se levantó de la misma y se puso su abrigo largo sobre su corta bata color naranja.
Ella salió de su habitación.
— Señorita Nekrásov, ¿Se le ofrece algo? — Preguntó de inmediato uno de los guarda espaldas que se quedaba en las afueras de la habitación de Kristy cuando ya ella se iba a dormir, por seguridad.
— No, solo… Iré por algo de tomar y—
— ¡Oh, sabe que no hace falta señorita! — Exclamó otro de los guarda espaldas interrumpiendo a Kristy. — Si quiere algo solo de la orden y nosotros de inmediato cumpliremos su deseo.
Kristy mostró una pequeña y débil sonrisa.
Una que estaba siendo acompañada de la tristeza en su rostro.
"Lo que más deseo, no lo puedo tener…"
"Siempre… me