Narrador omnipresente
Curthwulf, duda sobre lo que debe hacer, pero, asiente sabiendo que no es buen momento para preguntar más cosas a la mujer que claramente lo rechaza. Por ello, observa a los niños y sale en silencio suspirando profundo.— Señor…— Necesito que todos se preparen para ir a buscar a mi hijo. No me importa si tienen que destruir toda una ciudad, quiero que mi bebé esté con su madre y hermanos. — dice Curthwulf firme.— ¡Sí, señor! — dicen todos al unísono Curthwulf toma sus mejores armas y también, toma uno de los portabebés blindados para poder traer al bebé sin algún problema. Además, sabiendo que el bebé puede necesitar alimento, toma un extractor de leche y un biberón térmico con el que entra nuevamente a la habitación.Pensando si era buena idea tocar la puert