—Buenas, director, soy Adrián Hinojosa. ¿No sabe si está disponible ahora una mejor habitación en el Hospital de Ríomar? —preguntó Adrián con gran modestia.
—¿Ah, ya todas están ocupadas? Pues, usted tiene otra manera… —no esperaba a que Adrián terminara la frase, la llamada fue de inmediato colgada