38: Duele más por dentro.
Ámbar.
El aire del Jet de mi esposo comienza a darle una temperatura fría y tensa a mi cuerpo, mientras pienso en que quisiera regresar el tiempo y no haber hecho lo que hoy me hace sentir presa.
Esta mañana Darwin le ha pedido a Mylo que me lleve al centro comunitario para encontrarme con los integrantes de la organización, ya que como he visto: sí es cierta su palabra, ha despedido a Sebastian. Y al menos eso me hace sentir menos observada, y menos cohibida.
La presión que se mantiene en mi pecho realmente he tratado de controlarla, viendo algunos videos sobre la organización, conociendo a sus integrantes por redes sociales, quitando una y otra vez la mirada desesperada y llena de ilusión de Elian cuando se apareció en mi habitación, dispuesto a todo. Hasta arriesgar su vida, por mí.
Nada vale la pena.
Todo se remueve dentro de mí en cuanto dejo de ver mi teléfono y echo un vistazo dentro del jet.
La herida en mi cintura me provoca una mueca por el ardor que tengo en ella; tengo sus