[AITANA]
—¡Daniel, por favor deja de brincar! — Le regaño al ver que no se queda quieto mientras esperamos para abordar el avión.
—Tienes muy poca paciencia... — Bromea burlándose de mi Matías.
—¿Y tú? —
—Tengo tres sobrinos... me toco aprender. —Explica entre risas.
—Que bien, al menos ya vienes entrenado. — Remedo.
—¿Acaso soy un perro ahora? — Me pregunta haciéndose el ofendido.
—No me hagas responder eso guapo... Además, te veo todo así camuflado y no encuentro a mi novio por ninguna parte. — Digo mirándolo detenidamente. Gorra, lentes, una sudadera... —¿No tienes calor con la sudadera? —
—Claro que si, pero si me ven tomando un avión contigo y con Daniel, en tres minutos estará una gran noticia en los titulares de