Cap. 39 Fresa Fresca
«Y si del cielo te caen limones, solo te queda prepararte limonada»
Arios ya no le entusiasmaba nada y su tía estaba junto a él y ella lo apoyaba incondicionalmente; sin embargo, la mente estaba con Freda y le preguntó a su tía:
—¿Ella no se hizo la prueba?
—Dale tiempo para que asimile todo esto.
Uno de sus asesores se acercó a decirle que ya comenzaba todo, afuera toda la prensa importante del país estaba allí y eso podía abrumar.
Entonces salió Arios, y se lo veía afligido, y saludó a todos:
—Estoy aquí para anunciar mi retiro de la carrera política y de la vida pública… Dado los hechos recientes no me siento digno de aspirar a un escaño público.
Alguien le preguntó:
—¿Usted sabía de los actos de su tío?
—Lamentablemente no, ignoraba todo eso y cuando lo supe, resultó para mí una sorpresa desagradable.
—Su tío será enjuiciado, ¿usted piensa apoyarlo?
—La verdad, no, no estoy de acuerdo con lo que hizo y no estimo apoyarlo en ninguna manera, este Hudson desea mantenerse al