Annie
Nunca imaginé que un príncipe y un rey me escoltarian a mi hogar, en mi vida pasada tuve que haber hecho algo bien, para que esto suceda.
No voy a negar que sus majestades el príncipe Gerard y el rey Robb son atractivos, esa belleza que hace que gires a verlos cuando pasan.
Giro un poco para detallarlos y veo que murmuran algo, mientras el príncipe gira hacia atrás, hago lo mismo y me percato que cinco hombres nos siguen.
—No quiero alterar, pero cinco hombres nos están siguiendo y realmente aprecio mucho seguir con vida.
Ambos me miran y ríen.
—Son soldados reales, nos acompañan cuando queremos salir del pal