Aterrizamos en Santorini y los equipos de seguridad nos esperaban, yo tomé a mis hijos, los subí a la camioneta para ir a nuestra casa acompañada de mis hermanas.
—las chicas fueron a casa de Zafiro y nosotros fuimos a mi casa, porque se supone que todos los chicos nos arreglaremos juntos.
—¡hijas por fin llegan! —es bueno verlos.
—Keelan y yo tomamos a los bebés para consentirlos como siempre, deben darse una ducha, los estilistas ya están aquí, en estos momentos están arreglando a sus cuñadas.
—cuando llegamos a casa estaban mis cuñados esperando — ¡el novio es el último en llegar! —ja, ja, ja, es difícil despertar a una mujer muy embarazada —eso es cierto, hermano — ¿y tu padre?
—fue a recibir a mis hermanas y traería a Alessandro con el porqué todos los hombres deben arreglarse juntos, ja, ja, ja.
— ¿y Adriano no debería hacer eso con su hijo? —prefiero, no dar mi humilde opinión —gracias a Dios Leander, porque tu opinión nunca es humilde.
—creo que él llegará directo a la boda po