Después que la tía salió del cuarto, Marco le entregó los paquetes a Nahomy.
–Le traje este celular y esta table, son de la empresa. Debe tenerlos todo el tiempo consigo. Allí tiene mi localizador y yo tengo el tuyo.
–Está bien, gracias
–Y me gustaría empezar ahora mismo con los entrenamientos. ¿Puede?
–Está bien. Me cambio y voy al Gimnasio.
Pasaron al gimnasio. Ellos dos se dedicaron a entrenar.
–Vamos señor Marco, debe ser más rápido con las piernas –le decía ella.
Nahomy camina un poco a su alrededor y vuelve a intentar atacarlo con su pie a la cara. Marco se agacha y su pié queda suspendido en el aire.
–Ah, muy bien. &