ENZO
—No me toques los huevos y dime en dónde mierda está mi mujer —comienzo a perder la paciencia.
—No lo sé, ya te lo he dicho, fui por ella, estuvimos hablando y cuando le pedí que me esperara, al regresar ya no estaba, es todo lo que sé.
—Mientes.
—No miento, ahora largo de mi local.
El hijo de mil putas miente, lo sé, de no ser así, se atrevería a verme.
—No me iré hasta que me digas lo que quiero saber.
Brandon me desafía con la mirada, comienza a pensar