Al son de los violines James bailaba con Nicole, sus cuerpos se juntaron con el sonido de un vals , las cercanía de ambos les produjo una sensación de estar así por siempre.
- Quieres dar un paseo?- Preguntó James cariñosamente.
Nicole asintió con la cabeza, James le tomó la mano y salieron a caminar por las calles de París, la noche estaba fresca que le produjo un poco de frío a Nicole.
- Uf!! debí traer una chamarra - dijo mientras cruzaba sus brazos.
James la miró con ternura y le pasó su saco, se lo puso en sus hombros y la llevo abrazada.
- No te dará frío? - preguntó preocupada Nicole.
- No, no te preocupes, además tú me das calor..- dijo con un tono seductor.
Nicole se sonrojó por el comentario.
Caminaron por el puente de los candados, Nicole se sorprendió al ver tanto candados.
- Porque hay tantos candados? - preguntó curiosa.
- Bueno... cuenta la leyenda que los enamorados para que su amor sea eterno, deben poner un candado en la baranda del puente y lanzar las llaves al río.