No tienes leucemia.
Las palabras de Heidi, se repiten una y otra vez en mí cabeza.
—¿Cómo que no tengo leucemia?—pregunto a Heidi, después de un largó silencio.
—harper—intenta intervenir papá, pero levanto mí mano en un gesto de que guardé silencio.
—no—le digo a papá, y vuelvo mí vista a Heidi—¿Me mintieron?—pregunto elevando un poco mí tono de vos.
Ellos permanecen el silenció una vez más y eso me comienza a molestar.
—¿Me mintieron?—vuelvo a preguntar esperando algún tipo de respuesta, pero no llega.
Ellos definitivamente me mintieron.
Si no tengo leucemia, ¿que tengo?
—lo hicimos por tu bien—habla pap&aac