”No necesito decirles quién soy. ¡Lo único que necesitan saber es que van a morir pronto!”. Fane decidió no decirles quién era. Después de todo, el Clan de la Matanza tenía muchos miembros, y algunos podrían escapar si quisieran escapar con todo lo que tenían.

Si sabían que alguien con tanto talento como él había venido del mundo abandonado y que había conseguido semejante logro en tan poco tiempo, la Guardia de la Alianza seguramente se enfocaría en él más adelante. No querrían nada más que matarlo.

"Jovencito, ¿crees que eres el único que sabe cómo usar el Puño de los Dragones Gemelos?". El Primer y el Segundo Anciano intercambiaron miradas antes de separar las piernas para ponerse en cuclillas, preparándose para lanzar el ataque del Puño de los Dragones Gemelos.

“¡Puño de los Dragones Gemelos!", gritaron ambos, y pronto aparecieron dos puños con forma de cabeza de dragón. Estos enormes puños parecían tener varios metros de altura y se veían extremadamente poderosos.

Sin embargo,