Después de unos 30 minutos en los que Alek y Alessia charlaban de algunas cosas, Sonia le pidió que se fueran al despacho ya que en unos minutos llegaría Fiodor. Alessia nuevamente se metía en la enorme piscina y Fiodor abría las puertas de su despacho viendo con mala cara como Alek miraba por la gran ventana que justo daba hacia el patio donde se encontraba Alessia bañándose.
— ¿Te gusta lo que estás viendo? — Su voz sonó ronca haciendo que Alek desviara su mirada y se alejara de la ventana.
— Fiodor, cuanto tiempo sin verte… ¿Cómo has estado?
— Si has venido solo para preguntarme eso, te puedes largar ya…
— Perdón, pero es que el rumor sobre la misteriosa muerte de tu padre nos llegó un poco tarde. ¿Alessia sabe que lo has matado?, es una mujer maravillosa dejarme decirte… — Sonríe de lado sentándose al frente del escritorio.
— No me estés provocando porque te va a salir más caro