❝♡ Leah ♡ ❞
Cuando me dieron acceso a la habitación de Samuel, me sentí más tranquila. Ya no estaba tan hinchado como antes, aunque sabía que con tantos medicamentos se sentiría bastante mal en el momento que despertara. Al menos eso fue lo que me explicó el doctor que lo atendió antes de permitirme ingresar.
Luego de mirarlo durante un momento, dormido sobre la camilla, tomé asiento junto a esta y, al notar que movía mucho los dedos, tomé su mano entre las mías para darle calor y mantenerlo calmado en caso de que se tratara de alguna pesadilla.
—Susana… —balbuceó abriendo los ojos, haciendo que sintiera un fuerte dolor en el pecho. A pesar de todo, a pesar de lo que aquella chica le tuvo que haber ocultado, él seguía pensando en ella. Tal vez lo que me había dicho durante la discusión de la mañana fue mentira, solo que no quería admitir su amor por ella.
—No, soy Leah —suspiré mientras deslizaba delicadamente mis manos de la suya para romper el contacto, pero él alcanzó a sujetar