- ¿en serio?

- ¡si! Quiero arroz frito y unos rollos primavera, anda

- ¿Por qué no mandas a uno de tus empleados?, o ve tu

- ¿Qué van a pensar de mi si voy a ese lugar?

- ¡eres tan molesta!, de acuerdo, ya voy yo; pero mas te vale que esta vez de verdad te comas las cosas

-¡Graciasgraciasgracias! Eres mi salvador- dijo ella con voz cantarina

Simplemente la ignoré y me dispuse a satisfacer su deseo. Camino al restaurante me sentía molesto, la ultima vez que la traje casi me arranca la cabeza “Pensé que íbamos a algún lugar importante” dijo ella señalando con una mueca su vestido caro. Era consciente de lo poco elegante o romántico que puede resultar un restaurante de comida china; sin embargo, era un lugar importante para mí. Aquí había compartido muchas comidas con mi madre, quien adoraba el pollo agridulce y solía decir que era la mejor comida en todo Eón. Pero mi madre ya no estaba aquí, ella y los padres de Pyron murieron en aquel horrible laboratorio buscando una segunda formula de “energía limpia”. Durante los últimos 5 años pensé que la formula había muerto con ellos, pero hacia tres días que me habían entregado la memoria que contenía toda la investigación… ¿Por qué me habían dejado esto a mí? No quería hacerme cargo de la empresa, en eso mi primo era mejor que yo, pensaba darle la información en la noche después de la cena; mientras tanto, en mi muñeca, el dispositivo de almacenamiento pesaba como si fuera de piedra.

Llegue rápido al restaurante, me forme como todos, perdido en mis pensamientos. Tan pronto llegué al mostrador pedí lo que acostumbraba comer aquí: costillas de cerdo, pollo agridulce, arroz frito, rollos primavera y un té de jazmín, tenía que esperar un poco para recibir mi orden; sin embargo, mi teléfono comenzó a vibrar, respondí después de dejarlo sonar un par de veces. La voz al otro lado me tomo por sorpresa, era mi primo, parecía que mi padre había tenido un accidente y necesitaban que volviera a casa cuanto antes. En ese momento olvidé la comida, salí a toda prisa sin mirar muy bien por donde caminaba, una chica entraba mientras yo trataba de llegar cuanto antes, creo que chocamos, pero no tenia tiempo de disculparme. Solo camine tan deprisa como podía para llegar al auto. No tuve ninguna precaución.  Fui rodeado por varios chicos que aprovechando mi distracción me arrancaron mis pertenecías, por alguna razón el tipo que me sostenía tenia una fuerza sobrehumana, cuando miré sus dedos supe el por qué: era parcialmente un droid. Lo ultimo que percibí fue un ardor intenso en el pecho que me dejo sin aliento, un fuerte golpe en la cabeza que me dejo desorientado y una voz en mi oído que me susurró: “Él dice que tu padre esta bien, y que se verán en el infierno”. Al menos mi padre estaba bien. Iba a morir aquí, pero lo único que en que podía pensar es en el dolor intenso que se arremolinaba en mi pecho, fui abrazado por un frio intenso para luego hundirme en la densa oscuridad…

Cuando desperté me dolía la cabeza, había recordado lo que paso esa noche, pero no había sido algo agradable, debía de hablarlo con Evie y Viktor pero aun no estaba listo para volver a casa.  Habían pasado ya 5 días desde que salí y aun no quería volver. Por supuesto que mi padre estaría preocupado, pero tenía algunas dudas sobre Tabitha y Pyron.  Lo decidiría mas tarde, lo primero que haría seria preparar el desayuno, al menos sabia que estaba agradecido con esta familia por ayudarme sin conocerme. Empecé con algunos huevos y las lonchas de tocino que habíamos comprado por la noche anterior, algo de café.

• ¡huele delicioso! – dijo una conocida voz, Evie llevaba un pijama de color rosa claro que tenia dibujos de cerditos con alas, iba descalza y el cabello estaba suelto enmarañado, hermoso.
• Solo son huevos y tocino, ¿quieres un poco?
• ¡por supuesto que quiero!, estoy segura de que eres un chef o algo así, si no, no entiendo como puedes cocinar tan delicioso.
• ¿Y si no tuviera un empleo? – y había algo de verdad en esa afirmación
• ¡Puedes trabajar para mí! ¿Qué tal si te conviertes en mi cocinero personal? - dijo mientras se desperezaba y bostezaba
• ¡Suena genial! – cocinaría gratis con tal de verla sin ese horrible mono que solo arruinaba su delicada imagen
• ¿y cómo vas a pagarle? - dijo Vicktor detrás de ella, ya se había vestido para trabajar y se sentó a la mesa esperando el desayuno, serví todo y empezamos a comer
• Excelente pregunta papá, no creas que no he pensado en ello, creo que con tal de comer delicioso renunciare a mi paga- dijo con toda seriedad mientras llenaba por completo su boca de tocino- ¡La comida es primero!
• Tienes razón, a partir de mañana le entregaré tu paga a Ori ¿Qué dices Ori? - Ni siquiera pude responder porque Evie se atraganto con la comida, me levante para auxiliarla, y acercarle un vaso de agua
• ¿Qué tal media paga? –dijo como contraoferta con los ojos rojos y la voz ronca por la reciente tos, parecía arrepentida de haberlo sugerido.

Viktor se reía de su hija, parecían una familia muy cariñosa. Él había terminado de comer así que se levantó y le dijo a su hija

• Disfruta tu día libre
• Gracias pa

Nos quedamos solos, recogiendo todo lo que habíamos ensuciado para desayunar.

• ¿Qué harás de comer? – pregunto distraída mientras lavaba los platos
• ¿Que se te antoja?
• ¿sabes hacer lasaña?, ya sabes, la de verdad, la que no viene congelada.
• Puedo intentarlo, pero creo que nos harán falta algunas cosas.
• ¡Vamos por ellas! - corrió emocionada y no se percato de que el suelo estaba mojado y resbaló, corrí para atraparla, pero resbalé también, por lo que ella cayó sobre mí, con su rostro apenas a unos centímetros del mío y mi corazón latió fuertemente.

Ella se incorporo lentamente con la cara roja, mientras yo luchaba con toda mi fuerza se voluntad para no mirar sus rosados labios. Ninguno de los dos dijo nada.

Cuando por fin cruzamos el taller para salir Reznor se interpuso en nuestro camino deteniéndonos para que no pasáramos, Viktor estaba serio, lucia preocupado. La televisión estaba puesta en un noticiero y mi rostro estaba en la pantalla. Evie se puso pálida al mirar mi rostro y el nombre debajo de la etiqueta: Orión Sanders

• ¿secuestraste a un millonario? – Reznor se veía furioso, mientras me miraba como si todo fuera mi culpa
• ¡No lo secuestré! - respondió a la defensiva ella
• ¿tenia que ser un niño rico? ¿tenias que traer al hijo de Zachary Sanders?
• Mi nombre es Orión
• ¿lo sabias? - Evie me miraba molesta, ni siquiera espero a que le respondiera, salió corriendo a la calle y yo tras ella
• ¡Evie, espera, puedo explicarlo!

Pero ella corrió más rápido aun.