Natalia aún no estaba segura de si estaba haciendo lo correcto, pero algo dentro de ella la impulsaba a seguir adelante.
Tras enterarse de que Simón y Hailey habían oficializado su relación y todo parecía irles viento en popa, no pudo evitar preguntarse si aceptarían una reunión entre "amigos-conocidos".
Quizás era una forma de cerrar ciclos o simplemente un intento de mostrar que ella también había seguido adelante.
El plan ya estaba armado. Daniel y Astrid confirmaron su asistencia, al igual que Delia y Mateo.
Los padres de todos también estarían presentes, lo que garantizaba que la velada tendría ese aire de formalidad y cordialidad que tanto necesitaba. Solo faltaba que los Cáceres y los Baldwin aceptaran la invitación.
Sin embargo, antes de extenderla oficialmente, Natalia sentía la necesidad de hablar con Keiden. No estaba segura de cómo reaccionaría al ver a Simón, considerando la compleja historia que compartían.
Cuando finalmente reunió el valor para decírselo, Keiden