Entrar y ver a mi padre con los brazos cruzados me pone más nerviosa de lo que ya estaba y del otro lado Kend tan tranquilo no me ayuda mucho porque eso me confirma que mi padre es conmigo con quien está molesto.
- Papá. - Digo después de cerrar la puerta.
- Siéntate. - Me dice de la nada, me siento y trato de estar lo más tranquila que puedo pero su semblante no me ayuda mucho que digamos.
- ¿Dejo a que hablen los dos o me defiendo directamente? - Digo haciéndome la fuerte y la que tiene todo bajo control, cuando en verdad no sé que hago en realidad.
Sé que lo peor en estos casos es actuar por instinto y peor aun con la cabeza caliente y co