Madeline subió rápidamente al ascensor. Justo cuando salió, vio una figura familiar en el pasillo.

"¿Shirley?", la llamó Madeline indecisa.

La mujer que caminaba a poca distancia detuvo sus pasos y se volteó. "Soy yo, Señora Whitman". Shirley sonrió y explicó: "Olvidé algo en la habitación, así que he vuelto para recogerlo".

Madeline corrió entonces hacia Shirley. La mujer no era más que un salvavidas para ella en ese momento.

"El veneno en el cuerpo de Jeremy ha vuelto a afectarlo de repente, Shirley. Tú lo habías atendido una vez, ¿verdad? ¡Así que eso significa que puedes ayudarlo de nuevo! Por favor, ¡está sufriendo mucho!".

Al escuchar eso, la expresión de Shirley se transformó en una preocupación. "¿Dónde está Jeremy ahora?".

"¡En la habitación!".

"¡Llévame allá ahora!". Shirley siguió rápidamente a Madeline.

Al entrar en la habitación, Madeline vio que Jeremy ya había conseguido sentarse y estaba apoyado en la cama. Ella corrió inmediatamente hacia él. "Te pondrás bien,