Alessandro.

Respondo un mensaje de Stefan, cuando le comenté que saldría a bailar con Dania me exigió saber el lugar, es un poco paranoico con eso de la seguridad, cuando termino levanto la mirada en dirección a Dania, acaba de tomar el vaso de whisky que era para mí, antes de que pudiera advertirle ella le da un generoso trago, en cuanto el líquido entra en contacto con sus papilas gustativas abre mucho los ojos, suelto una carcajada, sin duda una bebida muy fuerte para ella que no ha probado el alcohol en su vida.

Está tratando de tragarlo, pero no tiene el valor para hacerlo, posiblemente pensando que ese ardor le recorrería la garganta y se quedaría en su estómago, esta a punto de escupirlo, sin meditarlo me acerco a ella para tomar su rostro entre mis manos, impacto mi boca contra la suya, con mi lengua separo sus labios para que me dé acceso a su boca, al principio se niega un poco después lo logro.

Mi paladar se ve envuelto entre el añejo y ardiente sabor del whisky que se e