Capítulo 158.
Justo en ese instante Oleika comienza a moverse de forma desesperada, como si estuviera en medio de una pesadilla.
Malcolm gira su rostro y comienza a moverla.
— Tranquila cariño, tranquila— dijo el ser llamado Enzo, estaba dentro del cuerpo de Malcolm sin esperar que lo que estaba por llegar podría ser una ventaja que jamás pensó posible.
Ironías del destino.
Oleika abrió los ojos y lo enfocó para después tensarse en completo, sintiendo pavor instintivo, después giró su rostro y se encontró con Trent pero la reacción fue la misma que con Malcolm.
— No te preocupes mi amor— declaró Enzo en el cuerpo de Malcolm, jugando muy bien su papel, tratando de tranquilizarla, observando cada una de sus reacciones, no quería ser descubierto.
Necesitaba confundirla lo suficiente para que no recordara su arrebato de la cueva.
Realmente no quería tener que asesinar al brujo mayor del aquelarre y cubrir más errores.
— ¿Quién…?— dijo ella entre jadeos —¿quién… quiénes son ustedes?
Ambos se quedaron i