Eremitas capitulo 36.

   La maldición eterna de los hombres. 

Pero mas lleno de rencor y presionado esta el hombre ante la justicia de ellos mismos , pobreza e incluso ¡indulgencia! encuentro yo, en la ley, y en ella misma ¡¡intención de reprimir!! psicológicamente. Estos sentimientos, generan sobrecarga , y una tensión continua que, transpola a una amargura inquieta, todo el tiempo, y no fácil de encontrarla ella llace en su estómagos y pecho y si hablara la represión de los hombres con respecto a la ley , dictarían así  : ¡ es lo correcto...! . ¡¡Pero no siempre lo que se considera correcto por lo masivamente aceptado es , en si, esencial , ni profundamente, co