Noah sentía volverse loco, eran ya casi cinco días sin saber nada de su prometida y Adara no parecía tener la intención de responder ninguno de los muchísimos mensajes que le había enviado.
Estaba quedando como un estúpido, ese día tenían que volar a Londres para la Fashion Week a la que habían sido invitados, si se presentaba sin ella, comenzarían los malditos rumores y el quedaría como un imbécil después de haber anunciado con bombos y platillos su compromiso. Todo parecía estarle jugando en contra, y una vez más, enviaba un nuevo mensaje para intentar contactar con Adara.
En el departamento de la rubia, Adara miraba a Héctor que ya estaba sentado en uno de los sofás dentro de su hogar. El silencio que se sentía era incomodo, el desea preguntarle sobre aquel compromiso anunciado y su extraña huida, y ella no sabia como le iba a responder a eso.
Nicolás se hallaba sentado en el regazo de su padre sin ninguna intención de apartarse de él. Aún seguía furioso con su madre por aquella