CAPÍTULO 14.

Legamos a la central justo a tiempo, literalmente.

Entramos a paso rápido mientras ignoro las miradas, incluida la de Isaac que me ve entrar con Damon, es claro que van a suponer que llegamos juntos —Lo cual es verdad, pero luego vuelven a confundir las cosas—

He tenido curiosidad sobre algo desde que salimos del edificio, no me corresponde preguntar pero prefiero no quedarme con la duda.

—Por cierto, ¿quién es mar?

—Nadie que te importe.

—No puedes besarme y luego decirme eso. Quiero saber.

—Si puedo y es lo que estoy haciendo—Continúa caminando.

—Damon—Pongo mi mejor voz amenazadora.

—Es con quien tengo sexo—Puedo notar el sarcasmo y no contesto nada, no es mi problema y tampoco está obligado a decirme porque no somos nada.

Ajá.

Me ve de reojo mientras