Me desperté y miré las paredes, no tardé en identificar dónde estaba: hospital. Había visitado el hospital durante más de un mes sin perder un día. Cuando por fin me deshice de él, me devolví a la posición que había ocupado Axel hasta ese momento.
No había nadie ahí. Y me sentí bien. Me levanté y caminé normalmente hacia la puerta. Cuando la abrí, vi a Martina y Thomas sentados en sillones en el pasillo. Tan pronto como me vieron, inmediatamente se levantaron.
- No puedes levantarte de la cama. - dijo Tomás.
- Me siento bien... ¿Qué pasó? ¿Tuvimos un accidente?
- Sí. - dijo martina – Pero no fue nada grave… Por suerte.
- ¿Y por qué motivo estaba acostado en esa cama? Me siento bien...
Mientras trataba de convencerlos de que no sentía absolutamente na