En un vecindario donde normalmente reina la paz y la serenidad; una fuerte y escandalosa música rompe el silencio. Pero, eso parece no afectarles a los residentes del lugar, quienes sin darle importancia al bullicio; se preparan para descansar luego de un largo y ajetreado día.
—Te ves hermosa. —halaga el menor, viendo a su hermana con ojos muy amplios.
—¿No crees que es muy ajustado? —cuestiona insegura, mientras se observa al espejo. —. ¿Papá no se molestará por esto?