Después de tantos años simplemente deje de buscarla. Pero que el día lluvioso un pequeño bulto chocó contra mí. Ella poseía un aroma exquisito... Estaba claro, ella era mi mate. Cuando quise mirarla vi que estaba muy mal herida y si esto ya era base lo bastante malo lo peor de todo es que ella era humana.
Leer másAntes de empezar quiero decir que este capítulo es duro, puede llegar a herir sus mentes. Es y era muy importante escribirlo para que supieran lo que había pasado nuestra protagonista Valery, y así comprender su actitud y sus miedos.
No tuve tiempo para llorarla, no tuve tiempo para despedirme de ella, solo me agarró del brazo y me saco arrastras de la casa, de un golpe me metió en el maletero del coche...
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Han pasado ya tres años de aquella noche, tres años en los que no he parado de rezar por mi propia muerte.
Escucho como me llaman, es hora de presentarme ante los desgraciados que disfrutarán de mi cuerpo esta noche. Y si digo disfrutar porque desde hace tres años me veo obligada a vender mi cuerpo. Si al menos pudiese escapar de esta vida, pero ya dejé de soñar con eso. Él no me lo permitiría, mi amo me moleria a palos por intentar escapar. Yo no soy nada, solo soy una esclava, su esclava.
Si tan solo ese desgraciado no me hubiese vendido para saldar sus deudas, si mamá estuviese viva. Igual mi vida sería diferente.
Para ser realistas no lo sería mucho más, él me saco de la escuela con diez años por lo que apenas se leer y escribir. Mi vida de antes solo era limpiar y buscar chatarra junto a mi madre, al menos tenía al lado a una persona que me quería.
Una lágrima rueda por mi mejilla al entrar en la habitación, esta noche solo hay dos caballeros y somos cuatro señoritas. Agachó mi cabeza intentando pasar desapercibida.
Salgo de la habitación y media sonrisa se dibuja en mi rostro, esta noche he tenido suerte. Demasiado aniñada, casi no tiene tetas... Esos fueron solo algunos de los comentarios que escuche, en lugar de sentirme menospreciada, me sentí aliviada.
—Dónde crees que vas Valery?—
— A mí cuarto, amo—respondo bajando la cabeza.
— Te he dado permiso para marcharte—dice agarrando mi pelo fuertemente y haciéndome caer.
—No, perdoname amo, no lo volveré a hacer— hablo entre sollozos por el dolor.
— Me estás empezando a aburrir, ni siquiera has crecido bien. Vas a resultar una mala inversión— dice pegándome una patada en el estómago.
No me muevo de mi sitio, él no me lo ha permitido y se que si lo hago todo será peor, ojalá y en uno de esos golpes dejará de respirar al fin podría estar de nuevo con mi mamá.
Comienzo a toser y veo mi mano manchada de sangre, mi estómago duele pero lo que más duele es mi corazón. No tengo que llorar eso es lo que más le gusta, verme llorar, llorar hace que me sienta débil, definitivamente tengo que intentarlo.
—Estúpida! levanta tienes clientes, que te levantes...— dice cogiéndome de nuevo del pelo.
Apenas si puedo andar, el dolor es cada vez peor. Llegó hasta la sala y para mí desgracia un hombre mayor y obeso me elige a mi.
— Qué quiere que le haga?— pregunto asqueada.
Me pide que me desnude y me tumbe en la cama, después él hace lo mismo y sube sobre mi. Cierro los ojos y espero que el tiempo pase.
Aunque sólo han sido varios minutos no lo hace menos asqueroso.
— Tocame, he pagado por una hora y aún queda tiempo de sobra—
Doy un suspiro y agarró esa cosa pequeña y flácida que tiene entre las piernas.
— No vales ni para excitarme perra, he pagado mucho por ti— dice propinandome una bofetada tras otra...
Intento abrir los ojos, solo lo consigo un poco estoy tirada en un callejón, o eso creo porque hace tres años que no piso la calle. Escucho animalillos chillar o quizás es mi imaginación. Igual ese maldito se ha cansado de pegarme, hoy no he tenido fuerzas para defenderme y menos para pedir ayuda.
—Creo que morirá en unas horas... ese desgraciado le ha dado una buena paliza—
— Ya me he ocupado de él, ese viejo asqueroso, mira que dejarme sin una de mis chicas, al menos le he quitado todo lo que tenía.—
Escucho una conversación pero no estoy segura, todo es borroso. La lluvia comienza a caer empapando mi cuerpo. Abro mis ojos de nuevo y veo que estoy en la calle, no hay nadie a mi alrededor la lluvia resbala por mi rostro y empapa mi cuerpo. Me estremezco al sentir el frío, no llevo abrigo, ni zapatos, solo ese pequeño vestido rojo.
Me levanto del suelo y me agarró a la pared, camino un poco el dolor es tan grande que siento que en cualquier momento voy a caer. Pero me obligo ha hacer un último esfuerzo, no quiero morir entre basura y ratas.
Quiero llegar hasta un parque, allí quiero ir. Recuerdo como mi madre me llevo una vez y allí fui tan feliz.
Jugué con niños y hasta mamá me compro un helado. Ese fue el mejor día de toda mi vida. Nunca antes probé un helado y nunca más después de ese día lo volví a probar... Camino bajo la lluvia encorvada y helada por la lluvia, levanto un poco la cabeza y veo árboles.
Mi cuerpo está a punto de rendirse, camino entre la gente y nadie me mira, solo soy un desecho de la sociedad, estoy en lo más bajo de la cadena. Esas palabras resuenan en mi mente, durante los últimos tres años mi amo no se ha cansado de repetirlas todos y cada uno de los días que he pasado en ese horrible lugar.
Un poco más Valery, solo un poco más me digo a mi misma, obligándome a continuar.
Cuando ya casi estoy me chocó contra algo, siento que mis piernas fallan pero no caigo al suelo.
Bueno al menos lo he intentado, por una vez en mi vida he sido libre para poder elegir, libre y dueña de mi destino, aunque no lo he conseguido. Antes de sumergirme en la más profunda oscuridad escucho una palabra.
— Mía—
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Escucho un pitido y veo una luz blanca, será qué ya he muerto? Pero por qué no avanzo y por qué no veo a mi madre? Un hombre con mascarilla me habla pero no entiendo lo que me dice, mis ojos se cierran de nuevo envolviéndome en la oscuridad.
Hoy es mi decimoctavo cumpleaños, es una fecha muy especial ya que al fin podré transformarme. Estoy nerviosa eso no lo negaré, no solo por todo lo que supone en la transformación, también porque hoy saldrá a la luz mi verdadera naturaleza.Mamá y papá han intentado por todos los medios que no la descubra, pero mi Tío Damian al final acabo contándome un poco,no me hizo falta que me dijese más ya que yo sola investigue.Se que ser diferente puede llegar a costarme la vida, muchos entenderán mi llegada como una declaración de guerra, y para nada es eso lo que pretendo. No quiero apoderarme de la Manada de nadie solo quiero vivir una vida tranquila con los míos, encontrar a mi pareja destinada y dirigir mi Manada.Miró el reloj por décima vez en lo que va de noche, la fiesta por mi cumpleaños a sido fantástica, pero ahora que ya sólo queda mi familia el tiempo no parece correr.Papa se acerca a mí, si semblante es pálido, normal no sabe en lo que me voy a convertir hoy.— Bella... hoy es
AriNunca pensé que mi vida fuese a cambiar tanto, nací y me crié entre maltratadores. Unos padres alcohólicos y la mayoría de las veces ausentes. Así que decidí que debía dejar esa vida, cuando cumplí los dieciséis años me escape de casa.Los dos primeros años los pasé viviendo en las calles, vivía de las limosnas y de lo que ahora digo con vergüenza, de lo que podía robar.Hasta el día que lo conocí a él. Sabía que era bastante mayor que yo pero aún así decidí probar, quizás esa era la figura paterna que buscaba, aunque para mi desgracia tampoco fue lo que esperaba. Al principio era amable conmigo y me cuidaba, pero después descubrí a base de golpes que tan solo había cambiado de ubicación, mi vida seguía siendo una vida de mierda.Quizás era lo que merecía después de todo. Así pasaron los meses y descubrí que portaba un niño en mi interior, eso me dió fuerzas para seguir continuando. Soportando maltratos y humillaciones. Nada en mi vida había sido gratis, todo tenía un precio, pero
Tres años después...— Jhon trae a Evan y a Bella es hora de cenar, por favor—Me asomo al jardín y veo como mi compañero juega con sus hijos y si digo hijos porque el que decía que no pasaba nada por una vez! Se equivocaba de ese celo nació Evan por lo que tengo a Bella con tres años y a Evan con dos.Los observó un rato en silencio hasta que escucho el sonido de un coche.— Vamos que ya están aquí!—Bella sale corriendo hacia la puerta y Jhon frunce el ceño. Cojo a mi pequeño en brazos y salgo a recibir a Damián, Ari, Joseph y a mi hermano.Bella se abraza a Joseph en el mismo momento en el que pisa el porche de la casa. No se si Damian tendrá razón o no, pero sean o no sean compañeros tienen un vínculo especial.Desde que nació Joseph Bells no quiere separase de él, se diría que hasta lo cela.— La próxima vez os toca venir a vosotros cada vez estoy más pesada y el bebé no deja de patear—— Ari no dejes que este grandullón te haga más hijos—— Ella no se puede resistir a este cuer
JhonNunca creí que fuera a verla, el día que mi padre la expulsó de la Manada pensé que jamás la volvería a ver. Pero de nuevo me equivocaba ya que ahora mismo me hayo en su búsqueda.Gracias a la Diosa Damian no ha soltado ninguno de sus comentarios cosa que agradezco. Está muy concentrado en buscar su rastro, ahora se que ella nunca se fue, cambio su forma y siguió viviendo entre nosotros aunque lo hiciera por temporadas.Cómo pensar que la amable viejecita que vivía a las afueras del pueblo podría ser ella, que ciegos y que ilusos fuimos.Lo que no entiendo es porque ahora y no antes, supongo que es algo que descubriré muy pronto.—Aquí termina su rastro— dice Damian quedándose quieto.— Pero aquí no hay nada, solo hay árboles—— Recuerdas lo que nos decía Nana cuando éramos pequeños?—Me pongo a pensar en sus palabras, que era lo que nos decía Nana, un recuerdo llega mi mente.** Nuestros ojos no lo pueden ver todo siempre, pero nuestros sentidos de lobo nos pueden ayudar**Cierr
No se el significado de la palabra fácil, para mí nada es fácil, ni gratis en esta vida. Cuando creo que las cosas están mejorando, cuando creo que todo va ir bien, viene otra cosa que la complica. Me pregunto si alguna vez las cosas serán fáciles para mí.Al menos tengo a Jhon y a Bella a mi lado. También tengo a Nana a Damián y Ari. A mi hermano y mi Manada también. Porque si, la vida o mi padre me arrebato lo que era tener una familia pero la Diosa Luna me la devolvió y con creces. Y así ahora soy ferviente devota de la Diosa ya que gracias a ella tengo una familia.Jhon ha salido temprano junto a Damián, de corazón espero que no les pase nada a estos dos. Que no los maten y menos que se maten entre ellos.No me lo ha dicho pero creo que han ido a arreglar las cosas por su cuenta sin necesidad de empezar una guerra. Se que Damian es el mejor rastreador, gracias a eso es que estoy viva. Así que no dudo de que encuentren a Evelyn y por lo tanto a Caroline y a mi suegra.Flash Back—
— Ari, tu sabes cada cuánto tiempo se da el celo entre los hombres lobo?—— Por eso lo de vuestra ausencia estos días!— dice Ari riendo de manera escandalosa.— No es gracioso, apenas si puedo andar—— Pues te veo bastante bien, yo en el celo de Damian no podía andar me dio como a cajón atorado— dice riendo— Ari...—— No te escandalices, ellos son mucho más ardientes que un hombre normal. Venga ya me pongo sería, lo siento— dice sin poder parar de reír.— creo que tienen el celo una o dos veces al año depende de su grado en la Manada—— Ya se lo habéis dicho?— digo señalando su barriga.— Shh... Te puede escuchar, es pequeño pero es muy inteligente para su edad. Quiero esperar un poco más pero conociendo a Damian se lo tendré que decir antes de volver a casa—— Será un niño como dice Damian, igual hasta tiene el don de la premonición después de todo— digo sonriendo.— No, ya te digo yo que no! Su hijo no será el mate de mi hija. No te ofendas Ari— dice Jhon a mi espalda.— No lo hago,
Último capítulo