Capítulo 125. Cumpliendo deseos
Capítulo 125. Cumpliendo deseos
Cristóbal Mendoza Ramírez
León, Guanajuato, México.
MESES DESPUÉS
Estaba muy feliz con mi nueva vida, seguía trabajando con el padre de Amaia y mi relación con Ivanna, había alcanzado al fin un punto estable. Me sentía completo en todos los aspectos de mi vida, tenía amor, tenía trabajo, tenía amigos y era muy feliz. Aunque nos costó mucho a Ivanna y a mí alcanzar la estabilidad que tenemos ahora, después de varios desacuerdos, ahora al fin podemos estar más tranquilos y lo que son las cosas, hoy cumplíamos 6 meses de haber regresado y estábamos más felices que nunca.
–Hola, mi güera hermosa – Le dije cuando llegué a buscarla a su firma – He venido por la mujer más hermosa del mundo para ir a cenar.
–Hola, Cris – Ella se lanzó a mis brazos – Muchas gracias, mi amor. Estoy lista para que nos vayamos, pero antes quiero darte algo.
Este nuevo comienzo es lo mejor que nos pudo haber pasado, los dos somos completamente felices. Ahora es como si nos hubiéramo