—De acuerdo —dice Eunika. Los dos chicos la miran sorprendidos.
—¿Lo has hablado con nosotros? —le dice con dureza Bogdan — ¿Ahora no tenemos ni voz ni voto? ¡Increíble!
—¿Te vas a poner a discutir por algo insignificante ahora? —bufa de mala leche Eunika.
—Solo digo que podríamos haber hablado con nosotros antes de decidir por ti misma.
—¿Enserio vas a hacer una rabieta por eso?
Bogdan le ignoró olímpicamente y giro su cabeza para mirar hacia la pared que tenía justo al lado derecho. Yo no sabía si reírme o llorar, parecían unos críos