Capítulo cuarenta y siete.
Mientras Lucía se sentía bien, pues el primer paso de su plan, había salido a la perfección.
En el hospital Anna comenzaba a despertarse.
David y Eva vieron que Anna, estaba despertando, llamaron al doctor, y también a Agustin.
Agustin fue corriendo a ver a su esposa, cuando llego el. Doctor ya estaba ahí.
— doctor dígame como se encuentra mi esposa.
— como le dije hace un rato, tiene que explicarle lo sucedido, para ver como reacciona esperemos, no tener que sedarla.
Anna despertó completamente, y estaba exaltada — mi padre Agustin, dime que no es cierto, mi padre no puede estar muerto, dime que todo esto es solo una pesadilla, mi nana no puede a ver muerto, si ellos no estan en mi vida yo también moriré.
Agustin abrazo a Anna para tranquilizarla, pero Anna se levanto y se aparto de él, y debido a que tenia en la mano un suero intravenoso se lo quito, pero al hacerlo se sangro el brazo poco le importaba a ella, como estaba en este momento, e intento levantarse de la cama, lloran