Mientras levantaba el pulgar hacia arriba a Charlie, Julien exclamó en señal de aprobación: “¡Tienes razón, amigo! ¡Eso es mucho más emocionante que tenerlo en la cárcel!”.

Con solo oír que lo enviarían a una perrera, Jimmy supo que no pasaría nada bueno… aunque desconocía los detalles, ¡era muy obvio que Julien estaba encantado con la idea!

Se volvió con nervios hacia Charlie, sollozaba mientras preguntaba: “¿Amo Wade...? ¿Qué es eso de una perrera...?”.

Julien se rio fríamente incluso antes de que Charlie dijera una palabra. “Una perrera es donde se guardan los perros, por supuesto. Aunque hay perros literales y perros metafóricos, y tú eres de estos últimos”.

“Oh, no te preocupes. Es un lugar muy agradable donde tienes tu propia jaula y te darán de comer todos los días. Ni siquiera tienes que trabajar, así que quédate tranquilo y sigue comiendo hasta el día de tu muerte”.

El alma de Jimmy abandonó su cuerpo en ese instante.

¡¿Lo iban a encerrar en una jaula?! ¡Eso era mucho pe