Harper rompió a sudar frío al oír eso.

Se horrorizó y pensó en secreto: ‘¿Quinn se va? Si se va, ¿no será en vano el plan del Amo y Finley?’.

Como asistente de mayor confianza de Homer, Harper sabía casi todo sobre éste. Cuando Finley había volado en secreto a Nueva York, Harper fue quien había ido al JFK para llevarlo con la familia Fox.

Harper estaba al tanto del plan de Homer para hoy, por lo tanto, no podía permitir que Quinn se fuera todavía. Intentó demorarlos al decir: "¿No hay señal? ¡Eso es imposible! ¿Hay un malentendido aquí?".

Charlie dijo con firmeza: "Nuestros guardaespaldas nos dijeron que las señales de radio y teléfono desaparecieron de repente, lo cual es muy extraño. Acaban de salir para informar a los guardaespaldas fuera. Pronto vendrán a llevarse a la Señorita Golding".

Dicho esto, Charlie puso una cara severa y explicó: "¡Aunque se trate de un malentendido, no podemos arriesgar la seguridad de la Señorita Golding! ¡Por favor, compréndelo!".

Harper se apresu