Carmen dijo apresuradamente: “No estés tan apurado. Me gustaría molestarte con otro asunto. Al padre de Tom le gustaría hablar con él por teléfono. ¿Crees que sería conveniente para ti?”.

“¿Hablar por teléfono?”. Charlie frunció el ceño antes de mirar a Tom, quien estaba arrodillado en el suelo con miedo y temor, mientras encendía el altavoz directamente y decía: “¿Qué tal esto? Dile a su padre que puede hablar con él por teléfono, pero que solo podrá hablar con él por dos minutos. ¿Eso estará bien?”.

“Sí”.

Muy pronto, Zacheus, quien había recibido la respuesta de Carmen, llamó al celular de Tom.

Después de que Charlie respondió a la llamada, inmediatamente encendió el altavoz mientras le entregaba el celular a Tom.

Zacheus, quien estaba al otro lado de la línea, preguntó titubeante: “Tom, ¿estás allí?”.

Cuando Tom escuchó la voz de su padre, se derrumbó emocionalmente mientras lloraba y decía: “¡Papá! ¡Sálvame, Papá! ¡Hay un hombre aquí que quiere enviarme a trabajar como miembr