Al entrar en el reino creado por Lemuel, James notó que todos sus poderes y su base de cultivación habían desaparecido. No podía activar ni empuñar ninguna de sus habilidades características.
Poco después, James llegó a un pequeño pueblo. Todos los habitantes eran gente corriente sin poderes especiales ni base de cultivación.
James frunció el ceño mientras observaba su entorno y pensaba en los cambios que había sufrido su cuerpo. Murmuró en voz baja: "¿A qué clase de pruebas me enfrentaré en este reino?".
James no tenía ni idea de lo que Lemuel quería ponerle a prueba al presentarle este reino.
Lemuel solo dijo que James tenía que salir del reino para que se considerara un éxito. Sin embargo, James no tenía poderes ni habilidades en ese momento. Tampoco tenía ni idea de lo grande que era el reino ni de cuánto tardaría en llegar a su límite.
James no sabía qué hacer en ese momento.
Mientras deambulaba por la aldea, James se dio cuenta de que en la zona vivían algo más de cien familias.