“¿Qué está pasando? ¿No estaba todo bien en hace un momento?”.

“Hoy es mi cumpleaños y el de mi novia. Estábamos planeando obtener nuestro certificado de matrimonio hoy. ¿Qué pasó?”.

Mucha gente se quejó al salir del Departamento de Asuntos Civiles.

Mientras tanto, James estaba eufórico.

Era un sentimiento más alegre que ganar una batalla.

Caminó hasta el borde de la carretera y se metió en el coche de Henry. “Vamos, Henry”.

“¿Adónde vas ahora, James? ¿A la Casa de la Realeza o a la clínica?”.

James bostezó. “A la clínica. Necesito tomar una siesta”.

Había bebido hasta muy tarde la noche anterior y todavía estaba un poco somnoliento.

“De acuerdo”.

Henry condujo hasta la Clínica Común.

Al no poder divorciarse, Thea se dirigió a la compañía para seguir ocupándose de los asuntos de la misma.

James durmió hasta el mediodía.

Fuera de la Clínica Común, en un puesto de comida en la Calle de los Nueve Dragones.

James puso un pie en un banco mientras masticaba un ala de pollo.

“H