James alzó una ceja. “¿Difundido por todo el antiguo mundo de las artes marciales?”.

“Así es”, respondió Tapio con una sonrisa.

James preguntó: “¿Quién difundió la información y cómo supiste del Mausoleo del rey Quavon?”.

En ese momento, James sintió que había sido engañado.

La Deidad Omnisciente le había vendido la información sobre el Mausoleo del Rey Quavon y él había aceptado la ficha de jade de la Deidad Omnisciente, por lo que tenía que cumplir con una solicitud suya. Si la información ya se había difundido ampliamente y todos lo sabían, sin duda había sido engañado.

“¿La Deidad Omnisciente te lo contó?”, volvió a preguntar James.

“No”. Tapio no ocultó nada y respondió abiertamente: “Yo tampoco tengo idea de quién difundió la información. Acabo de escuchar algo sobre la historia de la familia Blithe y descubrí que obtuvieron el plano de las trampas en el Mausoleo del rey Quavon, así que vine de inmediato. No esperaba verte al llegar”.

Tapio caminó hacia James, mirando la e