Yuri subió lentamente a la alta plataforma, escoltada por varios soldados. Las cadenas de hierro se arrastraban por el suelo, emitiendo sonidos al moverse.

Yuri lucía indiferente y no se sentía preocupada en lo más mínimo a pesar de que había sido capturada. Como hada nacida en el Mundo Virtual de la Ilusión, no solo era bondadosa, sino que también tenía una personalidad fuerte. No obstante, ella no le tenía miedo a la muerte en absoluto. Más importante aún, creía que si Darryl estuviera en el mismo continente que ella, haría un esfuerzo para salvarla, apenas recibiera la noticia.

‘Sin embargo, no he tenido noticias de él después de tanto tiempo buscándolo. ¿Está realmente en el Continente Roland?’, pensó Yuri mientras un rastro de tristeza cruzaba sus ojos.

Los espectadores estaban concentrados en Yuri y hablando entre ellos. Algunos se lamentaban, mientras que otros expresaban simpatía.

“Ella es una mujer tan hermosa. ¡Cómo pudo pretender ser la Diosa de la Luz!”.

“¡Sí, qué lást