¡Eso era correcto!
Ambrose asintió en silencio, pues estaba de acuerdo con la afirmación de Eira. Luego, observó a Hacken con atención mientras esperaba una respuesta.
Hacken sonrió con amargura y se dispuso a hablar.
¡Bzz!
De repente, la Isla Coral tembló. Aunque la frecuencia de la vibración era leve, todos la sintieron. Parecía un terremoto.
"¡Mira!".
Entonces, alguien gritó desde el exterior, y todos miraron hacia el horizonte lejano.
A lo lejos, en el cielo distante donde se encontraban los Nueve Continentes, se formó una espesa niebla negra en la atmósfera como si fuera el fin del mundo.
Esa era la señal de que la Cordillera Caótica estaba en peligro.
Ambrose y Eira no tenían ni idea de lo que significaba. Pensaron que era una señal de que había surgido una antigua tumba o un tesoro.
"Oh...".
Sin embargo, Hacken estaba temblando. Salió lentamente del salón principal mientras miraba el cielo lejano y murmuraba: "Se formó una niebla negra en el cielo junto con