Destino 16

El lobo quiso retroceder sintiéndose abrumado ante aquel intenso abrazo, pero los brazos alrededor de su grueso cuello se lo impidieron. Cuando lo hizo se llevó a Jade consigo dejándola sentada. Aun así no hizo nada para agredirla o dejar que la dejara de abrazar. La joven parecía sentirse reconfortada por estar junto a él y no era una sensación para nada desagradable.

Después de al menos tres minutos Jade soltó al animal después de darse cuenta que debía estar sofocándolo. Después de todo ya era lo suficientemente grande para percatarse que no era un simple perro, sino un lobo.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados