Capítulo 30: Una fotografía del pasado.

Por ahora no tenía tiempo para seguir insistiendo al teléfono de Abbot, porque sencillamente este sonaba y el hombre no respondía. Pero ya se las cobraría, con todo lo que tenía y no sería lindo, para nada.

Ahora, debía enfriar la mente y pensar muy bien cómo iba a sacar a Rickon de ese lugar, porque estaba claro que para el chico ese lugar era así como un santuario. Para ella era el perfecto nido de ratas que desparraman la podredumbre en su ciudad.

-¿Estás segura que quieres ser tú quien sea la carnada? Tenemos más chicas que podrían…

-No, sabes perfectamente que este tipo es tan valioso para Finnick como para mí. Nada puede salir mal, así que es mejor que lo haga yo misma.

-¿Y si no quiere ir contigo al Caribe?

-Para eso tengo un par de amigas que me ayudarán – se guarda dos Glock,

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo