- Mi ex- amante- susurró Diego
-La leona- murmuró Nick
-Mi mujer... solto Adriano, casi tropezando las palabras, mientras sus amigos lo miraban sorprendidos, la mujer de su amigo era la diosa del olimpo.
-¡Maldición!---- pensarón....
-Esa mujer... es....es... tu... esposa... susurró Nick... Diablos, Adriano con razón te tiene loco.
-¡Cabrón! No me vengas con esa idioteces o te corto los huevos.
-Ya no te quejes... hombre--- dijo Diego... Nick tiene razón esa mujer ....esta...
Las palabras que Diego iba a pronunciar fueron calladas por Adriano con un codazo.
-¡Es mi mujer! Dejen de verle las tetas...
-¡Perdon! ¡Hermano! Pero no somos los unicos que estamos mirandola, son todos los hombres.
-Es cierto, sino es por las fotos que nos has enseñado de ella, jamás hubieramos creido que esa mujer fuera tu esposa.
-¡Es ella, lo se por el maldito lunar que tiene en su cuello!
Adriano miro a su mujer con una mirada penetrante dejandola desnuda, con una llama de deseo que solo ver